19/3/12

Instrucciones para encontrar al amor de su VISA


Instrucciones para encontrar al amor de su VISA

La desesperación es mala consejera:
aprender el ligue es cuestión de rudimentaria pedagogía

Amy: entiendo que algunas personas
buscan compañeros en lugares de reunión
social tales como bares o tabernas
¿Has intentado en un bar o una taberna?
Leonard: no, no voy a ir a buscar una mujer
en un bar.
Sheldon: sabia decisión. Verás Amy,
el éxito en un bar está basado en los atributos
clásicos de un hombre, como altura, fuerza
atractivo, la habilidad de aguantar licor y
lanzar dardos por separado o a la vez.
Leonard no tiene ninguno de estos atributos
¿Verdad Leonard?
Leonard: cierto.
Amy: no es cierto, no en todas las barras.
Barras de jugo, por ejemplo.
The big bang theory


Dejarnos llevar por una prematura desesperación de querer encontrar al amor de la VISA (o en su defecto, el amor de la vida) cueste lo que cueste, requiere planteamiento y observación a gran medida. Pero sobre todo concentración y trabajo meditativo, puesto que, ante las imposiciones ridículas de estereotipos idealizados por muchas mujeres, los terrenos de combate sólo son mera abstracción, pues para endebles conquistadores, que no contamos con los atributos suficientes para lograr un ligue efectivo, es simplemente cuestión de perspectiva y nada más.
         El aprendizaje que podemos adquirir de la Teoría del Big Bang es razonable y entendible, puesto que para poder encontrar a la pareja ideal es necesario abolir los terrenos en los que sabemos que no somos los machos dominantes. Aunque la validez de una tesis de este orden presume que al acercamos a un bar con la intención de encontrar al verdadero amor, nos veremos en la necesidad de competir y tratar de agradar más que los que ya tienen las experiencias y se consideran viejos lobos de mar.
         El verdadero amor reside en otra parte, lejos de las intermitencias generadas en los bares, puesto que en un terreno en el que las jaurías se emulan a sí mismas, la realización de nuestro ideal se manifestará como ilusorio, lo que me recuerda que en Loco por Mary, Ben Stiller nos ilustra con indubitable pedagogía esta cómica situación, que a ojos de un experto parecerá vana y sin sentido. El personaje nos sugiere que antes de ir a una cita deberíamos programarnos una previa masturbación para que al estar frente a una mujer, nuestra mente esté más activa y concentrada en su acometido: ligar, puesto que generalmente las feromonas pueden delatar nuestras oscuras intenciones y echar a perder el fin último que nos compete. En este sentido, el chango-león se ha adaptado tanto a su fauna que le es posible lograr calmar sus feromonas al punto de pasar desapercibido por las chicas en cuestión.


No hay mejor explicación que bosqueje de manera objetiva el ambiente al que se va a enfrentar un debilucho e inexperto pretendiente, que el que se genera en un bar, pues generalmente quienes buscamos una relación estable y perdurable, sobre todo, se extrae del superlativo dimensional en un bar.
Y concluye Amy de la siguiente manera: desde una base neurobiológica, Leonard, quizás estás solo porque tu estado psicológico está causando una peste basada en feromonas de desesperación.

17/3/12

Poemas sueltos

Me estoy muriendo


Las siguientes son, quizás,
 las últimas palabras
de un alma que convalece ante mis ojos
y me pide le tienda una mano. Me es
imposible: se aleja y llora y pide
más alcohol. Bebe y no es capaz de disfrutarlo.
Espero haber sido fiel a su cruel destino
escrito con sus propias palabras.
De mi amigo
imaginario: el borracho.

         I
me estoy muriendo
me estoy muriendo

¡que me estoy muriendo
de una enfermedad llamada amor!
y me quiero curar
para continuar bebiendo
alcohol

si me lo preguntan
(y aunque no me lo pregunten):
no es lo mismo
beber alcohol
sobrio de amor
que embriagado
de amor
y considero esta
razón suficiente
para querer continuar
mi vida
libre de todo amor infalible
o cualquier sentimiento superfluo
que actúe con alevosía
y ventaja sobre una víctima
descalcificada y errabunda

porque
contener pensamientos,
sentimientos, o coléricos reproches
de un alma sedienta de perdón, sedienta
de horror, de perforación o desolación (también)
es imposible
en serio
y al que haya temido a sus instintos
que me entienda y que por favor
me tienda la mano

esta es mi última petición:
no quiero morir de amor
                  
II
obligado a mis pensamientos
que me suprimen el ser…
simplemente:
existir en otro
no es lo mismo
que existir en mí
sin nadie
sin necesidad
de palpar un cuerpo
difícil de entender…

de lo único que me estoy muriendo
es de amor ¡maldita sea!
dejen de hacerme chequeos inútiles
no estoy dispuesto a pagar
diagnósticos irreverentes
groseros y ofensivos
a un alma que sabe lo que padece
¡me estoy muriendo de amor!
y si alguien tiene la cura
que me la dé
pues dicen los doctores que
el sesenta por ciento de sus acreedores
suele morir en estas circunstancias
y no quiero contribuir a las estadísticas
de un licenciado cuya licencia es curar

¿hablarle a Dios? a estas alturas
no habrá remolinos que me impidan
retroceder,
al paso en que voy
duraré si dura el infierno
que tampoco me soporta
por ser tan resentido


         Epílogo a manera de epitafio

sólo… sólo
deseo una borrachera feliz, perpetua

más perpetua que el mismo amor
¿se puede?

16/3/12

¡Pregón!

Pregón
                            II

cuando el alba nos alcance apaga el requinto
cuando el alba nos alcance apaga el requinto
cuando el alba nos alcance apaga el requinto
cercena la melodía y la vuelca hacia sus lados ecuatoriales
mancilla su roedora franela de canto vespertino

ya las musas dejan sus zapatos, es hora de abandonar la tarima
dejarla descansar en el brío de una sedienta mañana
pulverizada por sus raíces maquiavélicas
continúa la fiesta, el festín que reconcilia a las almas
botadas al río —un atardecer se desvanece en mis ojeras—
veo la sensación de los músicos temibles y abrazados
a su diagonal contemplación
ese instante en el que los ojos desorbitados parecen irse lejos
de donde se encuentra la música, y palpo el instante de la agonía,
del nacimiento perpetuo en el balance de los párpados

nada revolcará nuestra danza de ojos porque orbitan aún en el fandango
sólo esta musa de sueños que se desprende de nuestras ideas
estamos de acuerdo y celebramos nuestro trance revolcados en el suelo
los músicos se empeñan porque nada detendrá nuestro canto
la mulata mañana nos abre las alas y su esplendor nos regocijará
cual ánfora de piedras de río sobre nuestro lomo descubierto
le debemos nuestras notas
le debemos nuestros zapatos
le debemos el sol que avanza
sobre nuestras cabezas acompasadas
nada detendrá el fandango
ni siquiera el toro masacrado
los únicos toros que conozco son de cacahuate, guanábana y coco
también hay jugo de piña, recibe el escarmiento
la muchedumbre celebra masacrando al toro
los toros que nos temen                    su temor se dibuja en nuestros ojos
brillan ante la masacre-masacre pudor alma y eternidad
sus ojos lloran ante el salvaje

botellas de estiércol
botellas de silicón
ya su cuerpo ni lo siente           el silicón me atrofió los pensamientos (dicen)
ya sus vísceras se retuercen bloqueadas dormidas retorcidas
y la adrenalina permea los senderos de su corazón agitado
carcomido por especímenes de diarrea trajinada
qué eternidad nos diste para sentirnos dueños de tu universo
qué contienda deberá seguir el hombre vuelto hacia su salvajismo
ante los ojos de un toro al que no le explicaron su situación
su devaluada retirada ¡toro-toro! ¡rumiar, rumiar! es lo menos que le permiten

cuando llegue la aurora desplomemos nuestra alabanza al creador
de esta realidad virtual de esta otra realidad virtual agazapada
desmembrada en el fragmento de nuestra ley obsoleta
cuando la aurora llegue no me mires de espaldas ante ella
su alma boreal se manifiesta en el cielo de su río
y los requintos ni han ido hacia su perfecta alabanza
comienza con un fraseo críptico o un fraseo de rebeldía
todo o nada
la gente está alegre
le daremos de comer
sólo necesitan acción más acción en el espectáculo
¿necesitan un mundo fuera?
¿nos verán llegar al alba?

son tan hermosos, tan humanos,
a veces los confundo con dioses
¿o son ellos los que Me confunden con humanos?
¿desperdician su inestable razón?
abraza la madera siéntete parte de esta difteria
la peste, si la ves de cerca, parece otra junto a tus manos
los gusanos vendrán a este aposento
Toros y Carne
nada más reconfortante que comenzar una semana
ligada a mis auras, ligada a mis cantos vespertinos

me afianzaré a tus reglas y detendré mi canto
no estoy de acuerdo contigo
los requintos nacen de nuevo, las musas suben a su tarima y la palpan con los pies casi deshechos por la epidemia pero mostramos luz y eso es lo que importa, nada tiene sentido ni lo tendrá, somos músicos ante la cruel noche de los símbolos

no esperes el alba sobre tus hombros descubiertos pues te daré una aurora bajo tus pestañas prensadas al astro que se apaga
no esperes la aurora ni siquiera cuando estés a punto de verla pues te daré una noche apocalíptica sin rastros cotejables
no esperes nada de mí pues estoy a punto de embarcarme en la odisea de mis días y no podré mirarte cuando zarpe en otras lunas
no esperes incienso ni crepúsculos tónicos pues palparé tus mejillas siempre y cuando me inspiren calor y canto
no esperes nada de mí, soy una cripta enterrada en los recuerdos de otros tiempos olvidados, ni siquiera los recuerdo
no esperes un aventón de mi parte, soy el que pide aventón al lado de las carreteras en espera de un aventón de tu parte

¡callen!
¡callen!
¡ya viene!
¡ya viene!
el alba nace en las manos
se escurre como pergamino
alba sedienta de nuestras notas
nadie la tocará

quédense quietos y palpen con las voces
el núcleo de su órbita

¡saludo al alba que viene
montada en sutil carruaje!
¿y el viento que la detiene,
cortejo es de suave encaje?

15/3/12

poemas sueltos


la fotografía es cambiante e infinita

la fotografía es cambiante e infinita
te digo que la fotografía es luminosa, insólita

perpetúa la hoja sobre la imagen de la película,
caudal de espirales: ¿reflejo o espejismo?
soy un extracto temporal de la humanidad

aún siento pánico a mirar rostros plasmados
en papeles diseñados para retener historia
rostros que ahí quedaron
restos de voces en equilibrio
caras que imploran, meditan, levitan
sudan
equilibrio de voces
restos atorados en el tiempo
restos que absorben la claridad de la tarde
diseñada para rostros fotogénicos
el piano que ejecuta bordones
ante los últimos claros del cenit

la fotografía es cambiante, luminosa
no me escuchas pero de entre estos desvaríos
alguna copla se nos escapó de los labios
alguna copla se confundió con los sonidos
que transitan las costas de la rudimentaria atmósfera
la hora de los muelles, cuando se pueblan de turistas
y músicos en el enclave del ocaso

la fotografía es cambiante, insólita
y a veces puede utilizarse como impermeable
para cubrirnos de la muerte
cuando llueve a cántaros
o cuando los muelles son invadidos
de la brisa marina, de la tempestad
de los barcos

y cuando la usas de escafandra
se puede navegar a murmullos
los sofocantes claros del cielo
en su último ataque interrumpido
por el ocaso

te lo digo pero la idea se esfuma
como un eco perdido en un laberinto
y después es inútil recordarlo